Un sueño: Cultivar en América
Por Liz Daehnke
La vida diaria en una granja fuera de Lexington, Nebraska, está lejos de ser lujosa. Sin embargo, Vicente Acevedo y Magdalena Barrios no lo tendrían de otra manera.
“Un día típico: regreso del trabajo, preparo la cena, limpio la casa, y luego salgo a ayudar a alimentar a los animales”, dijo Magdalena. “Nunca hay un día libre. Prefiero estar en la granja que ir a una fiesta”
La agricultura es vida para esta pareja. Ambos crecieron en ranchos en zonas rurales de México – Vicente criando animales y Magdalena ayudando a cultivar frijoles y maíz.
Emigraron a los Estados Unidos con un sueño: seguir cultivando.
Para lograr sus planes, el año pasado la pareja visitó su oficina local de Agencia de Servicio Agropecuario (FSA) para solicitar un préstamo para comprar tierras. Sin embargo, se encontraron con una barrera del idioma.
El gerente de préstamos agrícolas de FSA, Matthew Meyer, sabía que el Centro de Asuntos Rurales ayudaba a los agricultores latinos y alentó a Vincente y Magdalena a contactarnos.
Lucía Schulz y Kirstin Bailey, del Centro de Asuntos Rurales, estaban encantados de ayudarle. Interpretaron y ayudaron con los estados financieros y planes de negocios.
Vicente y Magdalena fueron aprobados para un préstamo de la FSA. Pero la asistencia no se detuvo allí. El personal del Centro compartió información sobre otros servicios ofrecidos por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.
-La agricultura es nuestra vida -dijo Magdalena-. “Si hay producción, ya sea ganado o producto, hay progreso. Lo amamos.”
Sus hijos también disfrutan de la vida en la granja y ayudan con las tareas diarias, como lo hicieron Vicente y Magdalena cuando eran niños – Magdalena en un rancho cerca de Jerez de García Salinas, Zacatecas, México, y Vicente en un rancho cerca de su lugar de nacimiento de Tepetongo , Zacatecas, México.
Trabajar con animales era la parte favorita de Vicente de la vida de la granja como un niño, y lo sigue siendo hasta el día de hoy.
Para comenzar su operación cerca de Lexington, compró unos terneros.
“Disfrutamos alimentarlos con botellas”, dijo. “Eventualmente compramos vacas y nos gustó aún más”.
Trabajar con Lucia y Kirstin y asistir a clases de agricultores iniciales ha puesto a Vincente y Magdalena en un camino hacia sus metas finales.
“El Centro sintonizó nuestros deseos en realidad”, dijo Vicente.
Ahora, Vicente y Magdalena tienen planes para iniciar una operación de pastoreo rotacional.
“Nuestro plan futuro es continuar criando animales y seguir trabajando fuera de la granja”, dijo Vicente. “Si no lo hacemos, no podremos expandir nuestra granja. Seguiremos cuidando nuestra tierra, para que nos dé buenos resultados”.
El número de ganado bajo su cuidado está creciendo, y esperan aumentar aún más el próximo año.
“Muchas personas tienen miedo porque no saben o no creen que pueden hacerlo”, dijo Vicente. “Todos deben asistir a las clases del Centro. El Centro nos ha abierto los ojos. Los sueños se hacen realidad.”
Vincente Acevedo y Magdalena Barrios dan la bienvenida a los agentes del Servicio de Conservación de Recursos Naturales del Condado de Dawson (NRCS) a su finca el otoño pasado. NRCS les ayudó a diseñar un sistema rotativo de pastoreo para su pequeño rebaño de ganado