Archdiocese submits sexual misconduct documents to Nebraska attorney general / Arquidiócesis presenta documentos de conducta sexual inapropiada al fiscal general de Nebraska
Archdiocese submits sexual misconduct documents to Nebraska attorney general
November 30, 2018 (Omaha, Neb.) – The Archdiocese of Omaha has submitted to the Nebraska attorney general documents pertaining to church personnel accused of criminal sexual misconduct since 1978.
The documents included information on 24 archdiocesan priests with substantiated allegations of the abuse of minors or misconduct with minors. In all, documentation on 38 clergy were given to the attorney general for alleged abuse or misconduct with minors as far back as 1956 but reported to the archdiocese between 1978-2018.
“We acknowledge this report with sorrow, and know that it will cause a great deal of pain,” said Archbishop George Lucas. “We’re deeply saddened so many innocent minors and young adults were harmed by the church’s ministers. To victims and their families, I am sorry for the pain, betrayal and suffering you have experienced in the church.”
Last summer, Attorney General Doug Peterson requested from Nebraska’s three Catholic dioceses the files of church personnel accused of criminal sexual misconduct. The attorney general’s request followed the Pennsylvania grand jury report on decades of clergy sexual abuse of minors in six of that state’s eight dioceses. The archdiocese immediately pledged its full cooperation and began a review of its files.
Of the 38 clergy with substantiated allegations of sexual abuse of minors or misconduct with minors since 1978:
• 34 offended before 2002 and the establishment of the Charter for the Protection of Children and Young People;
• 24 were archdiocesan priests;
• 10 were priests from another state/country/religious order ministering in the archdiocese;
• four were deacons.
The complete list of clergy is available online at report.archomaha.org. The report will be updated if the archdiocese receives future substantiated allegations or after the archdiocese conducts an upcoming forensic audit of its historic clergy files.
Archbishop Lucas said there is no one currently serving in ministry – 132 active priests and 215 active deacons in the Archdiocese of Omaha – who has had one substantiated allegation of sexual abuse against a young person.
“When we see these numbers that go back many decades, we can see that there was a pattern of failure – both on the part of those who misused their office to abuse minors and vulnerable adults, and on the part of those who refused to listen to victims in a compassionate, just and forthright way,” Archbishop Lucas said.
In recent listening sessions with rural and urban parishioners, as well as in numerous individual conversations, Archbishop Lucas promised that clergy will be held to a high standard of conduct as they perform their pastoral and sacred responsibilities.
He also promised a greater transparency in the resolution of cases of misconduct involving a member of the clergy.
“The higher standards of conduct and greater transparency are seen as essential in restoring the trust that has been compromised by the misconduct of a few, as well as to do all that is reasonably possible to protect vulnerable youth and adults from harm,” Archbishop Lucas said.
Archbishop Lucas said that in recent years, the archdiocese has followed standards which reflected best practices to determine whether a priest could continue in ministry, after having committed an act or acts of misconduct.
He said people are insisting that it is not enough to say that no criminal charges have been filed against a cleric, when a violation of his pastoral responsibility or the moral law have clearly taken place, when judging his fitness for ministry.
Archbishop Lucas said he is committed to look at the placement of all clergy, to ensure that they are meeting the rightful expectations of the church and of society.
“We have to acknowledge the ugly truth of the past so that we can repent, but also so that all in the archdiocese can be resolute in our commitment to ensure that no one is hurt going forward.”
“I see this as a moment of grace,” Archbishop Lucas said. “The acknowledgement of this painful part of our past allows us to better experience the healing and peace that Jesus desires for the church.”
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Spanish Version
Arquidiócesis presenta documentos de conducta sexual inapropiada al fiscal general de NebraskaSpanish Version
“Los estándares más altos de conducta y una mayor transparencia se consideran esenciales para restaurar la confianza que ha sido comprometida por la mala conducta de unos pocos, así como para hacer todo lo que sea razonablemente posible para proteger a los jóvenes y adultos vulnerables de cualquier daño”, Arzobispo George Lucas.
30 de noviembre de 2018 (Omaha, Nebraska). La Arquidiócesis de Omaha ha presentado al fiscal general de Nebraska los documentos relativos al personal de la iglesia acusado de conducta sexual delictiva desde 1978.
Los documentos incluían información sobre 24 sacerdotes arquidiocesanos con alegatos fundamentados de abuso de menores o mala conducta con menores. En total, la documentación sobre 38 miembros del clero se entregó al fiscal general por presuntos abusos o mala conducta con menores desde 1956, pero se informó a la archidiócesis entre 1978-2018.
“Reconocemos este informe con pesar, y sabemos que causará mucho dolor”, dijo el arzobispo George Lucas. “Estamos profundamente tristes de que muchos menores inocentes y jóvenes adultos hayan sido perjudicados por los ministros de la iglesia. A las víctimas y sus familias, lamento el dolor, la traición y el sufrimiento que ha experimentado en la iglesia “.
El verano pasado, el fiscal general Doug Peterson solicitó a las tres diócesis católicas de Nebraska los archivos del personal de la iglesia acusado de conducta sexual delictiva. La solicitud del fiscal general siguió el informe del gran jurado de Pensilvania sobre décadas de abuso sexual de menores por parte del clero en seis de las ocho diócesis de ese estado. La arquidiócesis se comprometió de inmediato a cooperar plenamente y comenzó a revisar sus archivos.
De los 38 clérigos con alegatos fundamentados de abuso sexual de menores o mala conducta con menores desde 1978:
• 34 ofendieron antes de 2002 y el establecimiento de la Carta para la protección de niños y jóvenes;
• 24 eran sacerdotes arquidiocesanos;
• 10 eran sacerdotes de otro estado / país / orden religiosa que ministraban en la arquidiócesis;
• Cuatro fueron diáconos.
La lista completa de clérigos está disponible en línea en report.archomaha.org. El informe se actualizará si la arquidiócesis recibe futuras denuncias fundamentadas o después de que la arquidiócesis realice una próxima auditoría forense de sus archivos históricos del clero.
El arzobispo Lucas dijo que actualmente no hay nadie en el ministerio (132 sacerdotes activos y 215 diáconos activos en la Arquidiócesis de Omaha) que haya tenido una denuncia de abuso sexual contra una persona joven.
“Cuando vemos estos números que se remontan a muchas décadas, podemos ver que hubo un patrón de fracaso, tanto por parte de aquellos que hicieron mal uso de su oficina para abusar de menores y adultos vulnerables, como por parte de los que se negaron a escuchar a las víctimas de una manera compasiva, justa y directa”, dijo el arzobispo Lucas.
En las sesiones de escucha recientes con feligreses rurales y urbanos, así como en numerosas conversaciones individuales, el Arzobispo Lucas prometió que el clero tendrá un alto estándar de conducta a medida que cumplan con sus responsabilidades pastorales y sagradas.
También prometió una mayor transparencia en la resolución de casos de mala conducta que involucran a un miembro del clero.
“Los estándares más altos de conducta y una mayor transparencia se consideran esenciales para restaurar la confianza que ha sido comprometida por la mala conducta de unos pocos, así como para hacer todo lo que sea razonablemente posible para proteger a los jóvenes y adultos vulnerables de cualquier daño”, dijo Arzobispo Lucas.
El arzobispo Lucas dijo que en los últimos años, la arquidiócesis ha seguido estándares que reflejaban las mejores prácticas para determinar si un sacerdote podía continuar en el ministerio, después de haber cometido un acto o mala conducta.
Dijo que la gente insiste en que no es suficiente decir que no se han presentado cargos penales contra un clérigo, cuando se ha cometido una violación de su responsabilidad pastoral o la ley moral, al juzgar su aptitud para el ministerio.
El arzobispo Lucas dijo que está comprometido a ver la ubicación de todo el clero, para garantizar que cumplan con las expectativas legítimas de la iglesia y de la sociedad.
“Tenemos que reconocer la fea verdad del pasado para que podamos arrepentirnos, pero también para que todos en la arquidiócesis puedan ser resueltos en nuestro compromiso de asegurar que nadie sea lastimado”.
“Veo esto como un momento de gracia”, dijo el arzobispo Lucas. “El reconocimiento de esta parte dolorosa de nuestro pasado nos permite experimentar mejor la sanación y la paz que Jesús desea para la iglesia”.